Nos llegan muy, muy poquitos films de Rusia tras su glorioso pasado cinematográfico soviético. Y aunque mi incultura me hace desconocer su pasado en el cine de animación me consta que llegó a ser brillante. Quizá tengamos una oportunidad de ver resurgir ese antiguo fulgor con esta colorida cinta dirigida por Lyudmila Steblyanko que narra una antigua leyenda de un cazador que recibe un encargo del zar. ¿Tiene o no tiene buena pinta?
