Infierno: Drawing restraint 9

Odio cuando cualquier director piensa que cuanto más pedante es mejor va a ser su película. En Drawing restraint 9 tenemos un claro ejemplo. Matthew Barney dirige a su siempre flamante compañera Björk en una historia incomprensible que ni siquiera la devoción que podamos sentir hacia la extraña islandesa hará que nos libremos del sopor. Debo reconocer que esta peli me sirvió para hacer coñas con un amigo durante todo un año en cuanto a lo que a cine pedante se refiere, pero poco más se puede sacar de ella. Bueno sí, el vestuario es bonito y algunas imágenes tienen su aquel, pero la peli como un todo es un coñazo insoportable. Lo cojonudo fue cuando en el baño, tras la peli, había quien decía que era buena... Hay gente pa' tó. En fin, damos la bienvenida a esta película a nuestro infierno cinematográfico, pues no le falta ningún mérito. Ah... y por si no había quedado claro... no hace falta que la veáis.